POESIA MISTICA EN EL MUNDO

CRISTO

Ese Cristo que podemos venerar
de metales, de colores y de luz
con los brazos abiertos, sin la cruz
suspendido en el cielo del altar…

La cabeza inclinada, dolorida
la mirada tranquila y muy serena
a pesar de las múltiples heridas
de dolores, tormentos y de penas.

Desde lejos yo me acerco reverente,
me arrodillo al llegar a su presencia
y me atrevo a mirarlo frente a frente.

Y a pedirle de su amparo la clemencia
que bendiga a mis hijos con bondad…
los aleje del dolor y la maldad…

Tomás Polanco Alcántara

Venezuela.

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AMO LA VIDA

Amo la vida, la emoción, el canto,
la gracia, el signo, el despertar del huerto.

Amo el misterio milagroso, el cierto
cauce del río, la región de espanto.

Amo el encuentro sin razón, el llanto
derramada por Cristo en el desierto;
la gloria de las horas, mundo incierto.

Mi vida, amor es la emoción del canto.

Y te amo a ti con la ilusión prendida
porque eres alma, significa vida,
lluvia, cielo, pasión y melodía.

Amo el silencio con que me recibes
y el cuchicheo de pájaros que escribes,
cadencia viva en el final del día.

José Miguel Oxholm.

Puerto Rico.

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LLUVIA, LLUVIA, LLUVIA

Beben los árboles
el llanto de las nubes,
el agua ha germinado
las entrañas del monte,
los regalos se llenan
del líquido maná,
en lo alto de la cumbre
se bañarán las aves.

Brilla el valle esmaltado,
gotean lágrimas
las hojas de las hayas,
el prado y la loma
se esponjan de placer
alfombrados de tintes
y de flores,
el firmamento cierra
sus ventanas,
corriendo el estor de encaje
bordado con hilos de oro.

Finaliza la fiesta
que el Cielo dio a la Tierra.

JULY VADEZATE

España.

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YO SE

Por qué brilla el sol
en lo más hondo de la vida
donde mora mi alma,
yo me recreo con las flores
y hablo con las palomas,
para enseñarles el camino
responsable y sereno de la vida.

Yo sé ahora de donde viene el viento,
y yo sé adonde va la lluvia,
también donde nace la canción
que fortalece mi alma
y la eleva hasta las regiones
más sutiles del puro amor,
y me envuelve en el perfume
de esas rosas y flores
del jardín maravilloso
de la vida que lleva tu nombre.

Victoria Díaz Morales

España.

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MEDITACION DIVINA

El agua que me corre por la frente
es el agua de Dios que me bendice.

Él sabe lo que fui y lo que hice
nadando por el mundo, y con la gente.

Hoy llueve sobre sí, cálidamente,
una voz luminosa, la que dice
de amor y comprensión. Que el cuerpo pise
(donde ahora) en terreno diferente.

¿Y el alma? Migratoria y descendida
de dudas, cante, corran, vuele, ardida
por la célica unión del agua – fuego.

La gota del Señor no quema, sana:
hierba de la piedad, llanto y tisana,
ardor de Cruz y bálsamo de Fuego.

Carlos Marcelo Constanzo

Argentina.

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A LA VIRGEN DE LA GUADALUPE

La calle desierta
la mirada fija.

Mantos de estrellas.

Invocan su nombre
…el espacio de blanco,
su sonrisa de nácar,
su imagen de arena.

La niña nos cubre,
de cantos y flores,
de nuevo la imagen,
de nuevo el alba,
el siervo que reza.

La virtud solloza,
la niña calla…
… ¿dónde está su rosa…?

Quizás en la playa…
… ¿dónde está su historia…?

Quizás en la barca.

El manto peregrino,
sus manos de lágrimas
…un pueblo que reza…

La bendición del Papa.

…el canto a lo lejos…

Un canto sonoro.

La verdad del alma.

La niña solloza.

La niña, mi niña.

Velas y plegarias,
voces de cascadas.

Judith Villamediana

Venezuela.

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A LA VIRGEN DE LA PAZ

Con la voz que en el alma se desgarra
Trujillo te venera de rodillas,
y tiene para ti trovas sencillas
y un mágico concierto de guitarra.

Erguida cual gigante cimitarra
sobre peñones colosales, brillas;
ojo de Dios, crisol de maravillas,
música y luz de la ciudad bizarra.

Tú que todo lo puedes, Virgen mía,
y que el amor pregonas en la altura,
haz que el hombre egolátrico y perverso,
trueque la guerra por la poesía,
y cual signo de paz y de ternura,
en cada corazón florezca un verso.

Mario Briceño Perozo

Venezuela.