IN MEMORIAM
LA TERNURA Y LAS HORAS ENCENDIDAS
La ternura —esa inmensa y fulgurante raíz americana —
La devora las entrañas de la bestia entonando los Salmos de Oise.
¿No es acaso —la plantaflor— del centro de los ríos
el oro negro que llora en los estrechos laberintos de
la razón la biela rota por la infamia?
Oh angustia... Oh ternura...
¿Qué sabes tú de los gritos de los condenados?
¿Es éste el pregón de las horas encendidas?
¡Ven a mí, poderosa fatalidad reinante!
¡Ay de los caminos solitarios!
¡Cuántas madres de Mayo te recuerdan!
(Febrero, 1984)
Fuente: Antología del Taller Prometeo de Poesía Nueva. Madrid - España. 1984. pág 31.
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Poemas de calidad, vibrantes, muy sentidos, nos ha dejado el escritor caraqueño Modesto Vargas López, quien falleció recientemente.
Concesión original, profundo sentimientos y un gran humanista que se entregó de lleno a la cultura.
Colaboró en diarios de nuestro país como La Religión, El Espectador (Barquisimeto), La Verdad (Edo. Vargas), Impacto, Semanario Miranda, Semanario Barlovento y La Revista Literaria La Caracola. Nos dejó sus acertados comentarios sobre la arte plástica, crónicas y otros temas de interés.
Se distinguió como políglota traduciendo al francés, ingles, alemán, italiano, portugués, ruso etc, la obra de muchisimos autores que le valió la distinción de varias academias y su poesía aparece publicada en antología de los mencionados países. Un humanista cuyo lema fue siempre "Pensar alto, sentir hondo y hablar claro.
En la compilación titulada "Perfiles de la Joven Literatura Venezolana" de Max Efraín Perez, colección Ateneo de Los Teques, 1996, se nos señala lo siguiente: Ese grito que 1987 parecía una visión lejana, la tierra de Neruda amaneció ganando el sol de la libertad. Modesto Vargas, toma el pulso del momento y nos ofrece este alegato, lindando con la metafísica. Habla el poeta:
Esparzan mis cenizas al aie
que las disfrute el viento.
Nos discutan,
obedezcan mis ordenes
envien mil voces al mar
contémplenle sus mascaras plateadas
decidan si les importan o no mi ausencia. (pág. 29)
Fue miembro fundador del Grupo de Escritores de Venezuela (1970) y director de la Revista Literaria Galaxia 71. También se desempeñó como miembro del Tribunal Disciplinario de la Asociación de Escritores Venezolanos (1978) donde brindó su apoyo a los jóvenes escritores venezolanos.
Reciban sus hijos nuestro renovado pésame.
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